Tenemos la satisfacción de anunciaros que hemos contactado directamente con un nuevo productor de fruta. Hemos empezado a comprar fruta ecológica con huesos de verano (nectarina, paraguayo, albaricoque, cereza e incluso manzana golden). Galo tiene frutales en Zaragoza y su familia tiene una larga trayectoria en la producción frutícola. La fruta que os podemos ofrecer es de la mejor calidad y la hemos puesto a la venta a un buen precio.
Hasta ahora no estábamos contentas con la fruta de verano que os ofrecíamos, ya que la traíamos principalmente a través de Gumendi, y como ellos la recogían de los frutales antes de que la fruta estuviera madura del todo y la introducían directamente en la cámara frigorífica para el transporte. Esto ocasionaba muchas veces que se comprarais fruta sin sabor y que se os estropeara en casa en poco tiempo. Este problema lo hemos tenido todos los veranos y en el cuestionario que os enviamos hace unos meses, muchos de vosotros también nos hicisteis llegar vuestras quejas al respecto. Nos ha costado encontrar una alternativa viable pero ya la tenemos en marcha.
Nuestra intención es no comprar la fruta de hueso a Gumendi, por lo que os ofreceremos la fruta de Galo, que recién llegue con la fruta tendréis gran variedad donde elegir, pero a medida que avancen los días, según las existencias, puede que os podamos ofrecer menos variedad hasta que vuelva a venir, por estar alguna agotada. Iremos tomando la medida y ajustando nuestros pedidos para poder ofreceros en todo momento la misma diversidad, os pedimos comprensión para que esta apuesta salga bien y todos disfrutemos de una fruta excelente. Hay que tener en cuenta que Gumendi viene tres veces por semana, mientras que Galo es un pequeño productor que se hace cargo del transporte, por lo que no puede venir tan a menudo hasta Oiartzun.
Galo es uno de los promotores de la marca Huerta de Zaragoza, puesta en marcha el pasado mes de marzo. Hace unos años los alimentos de la ciudad de Zaragoza se producían en 6.000 hectáreas de la zona, pero debido a la caída de los precios y a la falta de relevo generacional, la agricultura de Zaragoza ha descendido en los últimos años. Las cifras son escalofriantes, ya que han pasado de ser unos 300-400 hortelanos a ser actualmente sólo 30. Por su escasez, especialidad y proximidad, consideran que la huerta de Zaragoza es un tesoro que hay que cuidar, proteger y apoyar. El sello certifica que el alimento ha sido producido en un radio máximo de 50 kilómetros y comercializado mediante circuitos cortos. En Oiartzun, en la misma línea crearon hace algunos meses el distintivo HemenGuk.
¡Os animamos a probar esta excelente fruta ecológica producida acorde con nuestros valores!
